¿Qué son las compras a crédito?

Cuando un comprador adquiere un bien o servicio a crédito, no paga en efectivo, sino que utiliza un producto de crédito -como una tarjeta de crédito, una línea de crédito o una financiación- emitido por una entidad financiera o una empresa que dispone de los medios para hacerlo.

Cada comprador celebra un contrato con una organización financiera que ofrece este tipo de servicio, y se compromete a pagar esta suma según el calendario especificado. De forma similar a las tarjetas de crédito, puede ser con o sin intereses y durante un periodo de tiempo determinado (meses o semanas) o hasta una fecha determinada.

Cuando un consumidor utiliza uno de estos productos de crédito para realizar una compra, la entidad financiera paga íntegramente al comerciante y elimina la necesidad de que el minorista espere a que el cliente abone el saldo restante.

Aunque tradicionalmente las compras a crédito estaban estrechamente vinculadas a las tarjetas bancarias, en la actualidad varias opciones de pago digital permiten realizar compras a crédito sin necesidad de tarjeta.

Tipos

Teniendo en cuenta lo anterior, existen varias formas de establecer la compra a crédito en función de los siguientes atributos:

  • Estableciendo un pago único: cuando la compra se abona de forma inmediata, se requiere un pago instantáneo.
  • Aplazar pagando a plazos: En algunas circunstancias, la compra puede asumirse estableciendo una secuencia de plazos.

En este último caso, es más habitual que el vendedor añada intereses en función de la duración del aplazamiento.

En este sentido, es habitual que algunas empresas den prioridad a las ventas a plazos y a este tipo de créditos para garantizar un mayor grado de ingresos por intereses.